Doble actuación en Torre Levante de Santa Pola

Rehabilitación energética con aislamiento tipo SATE en edificio de gran altura, 16 plantas

RK rehabilitación ha sido la responsable de rehabilitar el conocido edificio de Torre de Levante, uno de los más altos y singulares de Santa Pola, que se encuentra frente a las conocidas calas de Santiago Bernabeu de la localidad. El edificio, que data de 1963, cuenta con 16 plantas de altura, incluida cubierta, 48 viviendas y locales comerciales. Antes de su reparación Torre de Levante presentaba anomalías tales como deformaciones, desplazamiento o fisuras preocupantes en los cerramientos de la edificación, a excepción del proceso de oxidación de los pilares y vigas y viguetas en balcones y voladizos. Por ello se ha actuado en los forjados; en las fisuras en paramentos verticales, cerramientos, medianeras; en los fajones fisurados permitiendo la entrada de agua hasta la estructura metálica y la cara inferior del forjado; en la humedad en paramentos verticales como en forjados (cara inferior) y pavimento ( cara superior forjado); sustitución de barandillas, cubiertas y patios.

Estamos ante uno de los edificios más imponentes en la localidad de Santa Pola, tras realizar una rehabilitación estructural años atrás, RK rehabilitación vuelve a este edificio para actuar en sus fachadas traseras donde en esta ocasión se ha colocado un aislamiento por el exterior tipo SATE acabado con un mortero acrílico. En estos edificios de costa que rondan los 40 años de antigüedad no encontramos aislamiento en sus fachadas por lo que el confort en la habitabilidad de la vivienda se merma.

El aislamiento tipo SATE consiste en adherir a la fachada unas placas de poliextireno expandido (XPS) adheridas con una tornillería especial que luego se recubre de un mortero acrílico. Hay que tener especial cuidado con los encuentros con las carpinterías de fachada donde se producen unos de los principales puentes térmicos y en las zonas de encuentro con la estructura se resuelve con el aislamiento con un mortero de baja densidad. Este tipo de actuaciones evita o reduce la aparición de puentes térmicos o zonas frías en la fachada; aumenta la inercia térmica y estabiliza la temperatura en toda la vivienda; impermeabiliza la fachada ante el agua de lluvia; permite el paso del vapor de agua desde el interior evitando condensaciones; optimiza la superficie útil de la vivienda al realizarse desde el exterior; permite rehabilitar térmicamente un inmueble sin desalojar el edificio; reduce las emisiones de C02 y gases de efecto invernadero.