Con una antigüedad de solo 3 décadas, el edificio Maristas, diseñado Fernando Andrés Silvestre es otro de los inmuebles emblemáticos de la ciudad, tal vez por sus dimensiones, ocupa toda una manzana o tal vez por su enclave, frente al palacio de la Diputación, donde diariamente centenares de personas pasar por su perímetro.
Precisamente por ello y pese a datar de finales del siglo XX, el deterioro de las piezas prefabricadas de hormigón situadas en el borde de cubierta y la consecuente peligrosidad por desprendimientos parciales determinó imprescindible adoptar medidas preventivas y su sustitución de manera urgente, trabajos que está acometiendo RK Rehabilitación.
La arquitectura del edificio, nada lineal y con infinidad de recovecos, obliga a utilizar distintos medios auxiliares: andamios tubulares de diferentes longitudes, descolgados o plataformas elevadores para poder llegar a las zonas que necesitan reparación. Así se está procediendo, por un lado, a la demolición de piezas de hormigón en borde de cubierta y sustitución por piezas prefabricadas de hormigón polímero «Marca ULMA» en el borde de cubierta. Por otro, a la demolición y reconstrucción de antepecho en borde de cubierta. Sin olvidar la reparación de pérgola de hormigón armado, y de fisuras y grietas en cerramientos de patios de luces.
Tanto para la propiedad como para Grupo Renovak y para la dirección facultativas, liderada José Luis Pérez Molina de ZereProjects, ha sido primordial el respeto por la estética del diseño original y la elección de las placas de polímero con escaso peso propio, durabilidad en el tiempo por su baja porosidad, y bajo mantenimiento salvo su limpieza con agua.
Disfrute del video sobre esta obra a vista de pájaro
Financiado por la Unión Europea NextGenerationEU
Finançat per la Unió Europea NextGenerationEU
Financiado por la Unión Europea – Next Generation EU. Sin embargo, los puntos de vista y las opiniones expresadas son únicamente los del autor o autores y no reflejan necesariamente los de la Unión Europea o la Comisión Europea. Ni la Unión Europea ni la Comisión Europea pueden ser consideradas responsables de las mismas